Oda de la sirena




Desde el alba hasta que anochece
existe una una línea que nos une
secando la tierra y ahogando el viento.
Con el alma en un hilo
recorremos el camino que nos aleja
sin cruzarnos ni un momento.
Repartiendo besos, libertad y llantos
promesas de espacios en blanco
para que escribas lo que se olvida.
Amor, no es esto lo que necesitas.
Esa marea ennegrecida por el desgaste de las horas.
No son golpes lo que el mar te regala
La reina del agua te saluda
a golpe de sonrisa y silencio.
Flota conmigo en la orilla,
ven a beber en compañía de las olas,
que el aire juegue con tus penas,
no me cuesta envejecer si me calmas el oleaje.
En el océano no flota más que agua,
respeta esa piedra perdida,
quizá sea más que tú en la negrura.
pero de dentro de mi alma ella no bebe
y tú respiras.

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