Se apagó la luz



Destruida por norma.

Ahora me das miedo de verdad,
porque estás de verdad cerca,
incluido en mi estado de rabia,
de oscuro pasado, de futuro inexistente.

No se mueve ni una hoja,
no hay ni un pájaro que cante,
sólo algún relámpago a lo lejos
como cuando alguien recuerda.

Yo me canso,
me rindo,
vuelvo a antes, a lo de siempre
como siempre.

Y que una espesa capa de tiempo
cubra cualquier paso hacia delante,
porque ya no seré roca
contra la que puedas estrellarte.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Un poema casi inventado

La Posada