A Lo Lejos (Antipoesía)



No insistas.
Alguien a lo lejos me está matando el sueño.
Alguien para los relojes del tiempo.
Alguien a lo lejos acaba consigo mismo.

No me culpes
si no se rondar por tu casa,
por no husmear en la tierra tus pisadas,
por traspasar tus muros,
por abrir los ojos para verte soñar.
por cavar zanjas
y despejar todos tus caminos.

Hasta el fondo del vaso,
también desde tu oscuro fondo,
caían mis palabras
difíciles,
amargas,
como gotas espesas y brillantes
que iba sorbiendo el tiempo.

Como cuando un gesto es para siempre,
como la tinta invisible de un idioma
que iba olvidando mientras lo aprendía.

Y el instante nacía solo para morir
de memoria,
en fuga hacia el presente.

Tenerte será perderte.
No tenerte será esperar que no llegues.

Fino hilo de los días...

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