En un segundo (antipoesia)



Tengo las manos frías.

He salido a la calle,
he vaciado las botellas correspondientes al día de hoy
y he regresado a casa
para volver a tumbarme sobre la cama.

He descubierto entonces
la enorme frialdad de mis manos.

Si, me preocupa
casi sin justificación,
porque es muy poca cosa tener las manos frías.

Este frío diciembre
está en mis manos, nada más.

Soy yo.
Veo la ventana igualmente cerrada
y la misma noche de siempre rodeándome.

En mí no es muy raro tener las manos frías.

Pero en un fugaz segundo,
mi pensamiento ha visto
la niebla tan probable,
las hojas grises del cuaderno de la vida,
donde el nombre que tengo estaría tachado
con la tinta del final de un recuerdo.

Comentarios

Lo malo de esas manos frías rehogadas en recuerdos de un diciembre de camas y botellas, es que dificilmente van a poder calentarlas unos tristes guantes.
Habrá que comprar un cuaderno nuevo y escribir nuevos nombres, nuevas letras...y no tachar ninguno. Almenosnodemomento.
desordenada ha dicho que…
Adoro tu blog. Que tengas buen comienzo de año (y final, por qué no) y escribe pronto, si te vienen las ganas, claro.

Un abrazo!
Egolastra ha dicho que…
Manos tan hermosamente frías que cuando golpean el teclado, y escribes un poema, en la distancia sentimos un escalofrío...

Un fuerte abrazo y que tengas un excelente año.

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