Noches de ciudad (Antipoesía)



A lo largo del tiempo
y en diferentes ciudades,
he visto a esa gente
que vive de noche.
alcohólicos de bar y acera,
niñas de una noche,
cuarentones olvidados.
Por calmar otra sed beben sin ganas,
y en sus ojos he visto esas preguntas
que a veces el amor supo acallar.
Pero ahora
muerto el amor,
en sus ojos seguían
esas mismas preguntas
que a mí me asaltan hoy ante la misma botella
en la falsa compañía de la noche:
¿Qué queda de la felicidad que algún sábado
he creído sentir?
¿O es que sólo existe
falsedad en la alegría?

Comentarios

desordenada ha dicho que…
Mejor que no sea falsedad. Mejor que sea una sensación, una emoción que provocan las luces de colores, las botellas esparcidas por el suelo de una plaza antigua, los tambaleos por las calles oscuras donde a veces es verdad que apenas llega la luz de la vida. Y del amor, claro.

Abrazo.

Entradas populares de este blog

Un poema casi inventado

La Posada