Parto




Entre gritos y maldiciones
salió aullando el mar,
tejiendo con hilos invisibles 
el veneno del apego.

Vomitando rencores,
celoso, 
egoísta,
exigiendo lo suyo.

Parto tardío y sin necesidad,
doloroso a ratos,
siempre perdiendo,
rogando un final.



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