No puedo dormir
Fue indescriptible lo que sentí al tumbarme en mi cama la primera noche.
Sola.
Sobre la espalda, con la pierna izquierda ligeramente arqueada y la mano derecha sobre la tripa, donde no hacía ni un día solía estar la tuya.
Y quedarme así.
Quieta.
Como esperando a que en cualquier momento abrieses la puerta y te metieses en la cama conmigo para pelearnos por ver quién le pone la pierna encima al otro antes de dormir.
El vacío es desolador.
Desesperante.
Asfixiante.
Absurdo.
Yo pensaba que dormir era una mierda.
Mentira.
Dormir sola es una mierda.
Comentarios
Está claro, las camas nunca son demasiado pequeñas para dos (tal vez en el matrimonio si xD).
besos!